Libia cae en una espiral de violencia
El representante especial de la ONU para Libia, Tarek Mitri, describió al Consejo de Seguridad de la ONU los múltiples riesgos que afronta ese país árabe y subrayó la espiral de violencia que ha vivido durante los últimos tres meses.
El también jefe de la Misión de Apoyo de la ONU para Libia (UNSMIL) ofreció un recuento de los principales acontecimientos del último trimestre.
Recordó los muertos y heridos provocados este mes por los enfrentamientos en Bengasi entre las fuerzas de seguridad y los manifestantes que piden el desmantelamiento de las brigadas que hicieron la guerra a Muammar Al-Qadhafi.
Asimismo, Mitri se refirió a la creciente polarización provocada por la nueva Ley de Aislamiento Político, que excluye por diez años de cargos públicos a las personas vinculadas al régimen derrocado.
Mencionó además la existencia de 7.000 a 8.000 detenidos que aún esperan se les instruyan cargos o ser liberados, y a las torturas y ejecuciones extrajudiciales reportadas en las cárceles.
“La UNSMIL ha reiterado que las ejecuciones extrajudiciales y la tortura no deben tolerarse en Libia, mucho menos por personas que fueron víctimas de la injusticia y la represión del régimen anterior”, dijo Mitri.
El representante especial recalcó que los retos que vive Libia no deben ser subestimados, de la misma forma que no deben ignorarse las oportunidades.
A pesar de la gravedad de algunos de los acontecimientos de los últimos los libios no han perdido la esperanza, y muchos se mantienen firmes en los principios que originaron su revolución, acotó el enviado.