Sahara Occidental

Anzuelo político para la pesca

Los ministros de pesca de España y Marruecos. / Magrama
Los ministros de pesca de España y Marruecos. / Magrama

Estrasburgo ha ratificado el día de los Derechos Humanos el ansiado acuerdo de pesca entre la UE y el reino alauí, un acuerdo que faena a los pescadores, que no enriquece a nadie y que afianza el lazo político. Un anzuelo mordido por las partes que se caracteriza por callar a pescadores, llenar bolsillos poderosos y no repercute sobre la población.

El protocolo aprobado por 311 votos en el parlamento europeo tiene una vigencia de cuatro años, con una contrapartida financiera aproximada de 40 millones de euros por cada uno de los cuatro años de duración del acuerdo.

Pero el pacto denota su estrategia política ante el altísimo precio que pagan, y ante el poco beneficio que realmente repercute. Es más, si el dinero invertido al año para el acuerdo se repartiera entre la flota, cabrían a un sueldo de más de 4.000 euros mensuales para cada uno de los pescadores, cuyo sueldo raras veces supera el mínimo. Según el Ministerio de esta cantidad, 16 millones corresponden a derechos de acceso y 14 millones en concepto de apoyo sectorial y cooperación al sector pesquero marroquí, y 10 millones procedentes de los pagos por licencias de los diferentes operadores que, en el caso español, suponen un incremento aproximado del 12%.

Expertos creen que el dinero desembolsado de la UE en Marruecos tiene un carácter político y su intención viene a desarrollar mejor su industria pesquera que beneficia directamente al desarrollo de Marruecos y beneficia al vecino europeo como socio privilegiado a la hora de comprar productos. Algo legítimo siempre que se trate de la soberanía marroquí.

No ocurre lo mismo cuando el dueño del pescado se alimenta de la ayuda humanitaria mientras que los estados desarrollados saborean sus recurso , y es que el último de los acuerdos, inhabilitado por el Parlamento Europeo, permitía pescar en aguas del Sahara Occidental, el recién aprobado, la pesca puede realizarse en “aguas que se encuentren bajo la soberanía o jurisdicción del Reino de Marruecos”, es decir incluye el Sahara, para ello la UE acordó que los beneficios debían repercutir sobre la población autóctona, divididos entre los campamentos de refugiados de Tinduf, controlados por el Frente Polisario, y la antigua colonia española, bajo domino marroquí.

Sin embargo, no ha habido una comprobación de que el pueblo Saharaui pueda obtener los recursos de esos beneficios, es más la premio Nobel de la Paz no ha preguntado a su población, en proceso de descolonización, de manera democrática.

Las relaciones entre Marruecos y la Unión Europea son más que necesarias ya que los beneficios mutuos son legítimos y perceptibles. Pero obtener los recursos de una región en conflicto perjudica a la ética, y un ente supranacional que quiere dar ejemplo de respecto internacional no puede quebrantar el derecho a la autodeterminación y picar de un anzuelo político.

El acuerdo de pesca da trabajo a una flota que da de comer a sus hijos, pero que olvida a los niños abandonados en el desierto cuyo pescado nunca probaron, y que ahora es esquilmado. La necesidad de solventar el conflicto del Sahara en el que los saharauis puedan decidir su independencia o integración con Marruecos solo se consigue con buenos gestos, y la UE debe apoyar ese acuerdo, el del referéndum, antes de llevarse el pescado y permitir unas relaciones bilaterales donde reine la cordura entre Marruecos y la UE, y no un acuerdo manchando por la ilegalidad.

Andalucía

Bruselas y Rabat, el eje de la acción exterior…

La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, en un mitin del PSOE. / Oficial
La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, en un mitin del PSOE. / Oficial

La llegada de Susana Díaz a la Presidencia de la Junta parece que no tornará mucho los intereses exteriores de la comunidad, a pesar de que ya ha dado pinceladas para que la región no sea una más en la agenda global. Díaz ofreció sus primeros tintes exteriores ante la reunión del Grupo Socialista y Demócrata del Parlamento Europeo, donde aclaró que sus intenciones seguían jugándose en Europa pero defendiendo políticas sociales que deben ejercer de ejemplo.

La presidenta de la Junta se mostró ante los eurodiputados como una líder de izquierda y con ganas de encender la mecha del cambio ante las políticas de austeridad llevadas desde Bruselas. El líder de los socialistas europeos, Hannes Swoboda, calificó a Díaz como la voz del «optimismo», tan necesario para afrontar las elecciones europeas. Pero Díaz también tiró de la oreja a la propia UE, a la que recriminó su incapacidad para lograr un acuerdo sobre asuntos migratorios tras la alerta del naufragio en la isla italiana de Lampedusa.

Y es que la presidenta sacó pecho a la situación de la inmigración, y puso a Andalucía como referente, ya que en esta comunidad ha sido donde más ciudadanos africanos han llegado a través de los peligrosos viajes en balsas de plástico o pateras en las últimas décadas. Díaz dejó claro la necesidad de una política en Europa que mejore la situación del asilo y el refugio en la UE que permita evaluar cada uno de los casos, ya que las últimas llegadas continuas de inmigrantes a las costas andaluzas dejaban en relieve la necesidad de estudiarlos porque la hambruna y la violencia eran los principales motores del viaje de unas personas pintadas de inmigrantes con cuerpos de refugiados.

Pero en Bruselas no sólo se cuecen asuntos tan importantes como la inmigración, sino políticas tan substanciales como la agricultura y la pesca, sectores elementales para la acción exterior de la Junta. Motivo por el que Díaz parece que mantendrá la actual oficina de la Junta en Bruselas. Allí, un grupo especializado trabaja día y noche para defender, muchas veces como lobbies, los interés de la comunidad autónoma ante las instituciones del ente supranacional.

Ese reto lo apostilló Díaz ante los eurodiputados reunidos en Málaga, y donde dijo que Andalucía debería ser la puerta a Europa en el mediterráneo y no el fin del continente. Una entrada que se interpreta como una mirada al norte de África que en los últimos años ha jugado un rol primordial en la estrategia exterior de la UE, y donde Marruecos es su principal socio, principal vecino andaluz.

La relación de Andalucía y Marruecos, sobre todo el norte, es una novela de amor ligada a la historia, la cultura y la convivencia. En los últimos años los puertos andaluces se han convertido en la puerta entre Europa y África. Y es normal que la cooperación transfronteriza entre ambas orillas sea buena, Andalucía juega ese papel positivo, y eso repercute en lo económico. La Fundación Tres Culturas es otro ejemplo de la búsqueda de una acción exterior ligada a Rabat, y cuya función no se ha cuestionado con el cambio de Gobierno.

Díaz ha dejado claro ante el parlamento andaluz su posicionamiento activo ante los acuerdos pesquero entre la UE y el reino alauí, que benefician fundamentalmente a la flota andaluza, y que simbolizan el gran acuerdo comercial entre ambas partes.

Pero este plan económico tiene sus defectos, y es el conflicto del Sahara Occidental, donde los socios de Díaz tienen muy claro cuáles son sus posturas. No obstante la presión de IU no ha sido suficiente ya que la presidenta de la Junta sigue con su plan exterior mirando al vecino marroquí.

Lógico. Ya que el papel de la acción exterior andaluza siempre ha estado ligado a la presidencia de la Junta, y que en estos últimos años sigue sin variar marcando como ejes fundamentales a Bruselas y Rabat, y aunque el peso de IU haya querido influir, Susana Díaz se muestra fuerte ante una acción exterior sin variantes.

Texto publicado en los periódicos del Grupo Joly

Andalucía

“Hay otra Andalucía en el norte de Marruecos”

Plaza de El-Hamman en Chef-Chauen. / S.R
Plaza de El-Hamman en Chef-Chauen. / S.R

Mirar al norte de Marruecos desde el sur de España es cada vez más frecuente entre los andaluces, que poco a poco van sabiendo que “hay otra Andalucía en el norte de Marruecos”.

Así comienza la conversación con Mohamed Sefiani, alcalde de la Ciudad de Chef-Chauen, una pieza de la historia de Andalucía en el norte del reino alauí. Chauen fue fundada en 1471 en el emplazamiento de una pequeña población bereber, y su población original estuvo compuesta por los andaluces, tanto musulmanes como judíos, expulsado por los Reyes Católicos.

Lo cierto es que un emir arabe, casado con una vejeriana, estructuró el pueblo tan similar al originario de su esposa que añoraba las calles estrechas de Vejer de la Frontera tras abandonarla por la conquista católica.

“Tenemos una historia de amor entre Vejer y Chauen” comenta Sefiani, y asegura que compartimos tanta historia que ”tenemos que trabajar juntos”, por ello este político marroquí capitanea una red de medinas mediterráneas con casco histórico ya que su objetivo es la conservación y valoración del patrimonio.

Y es cierto que Andalucía y el norte de Marruecos son demasiado similares, motivo por el que no extraña que tanto calles, paisajes y rasgos culturales sean tan semejantes. Pero el buen entendimiento entre dos vecinos siempre depende de los gobiernos centrales a pesar de los esfuerzos de la política local, y Chauen y Vejer también tiene algo en común, que tanto Rabat como Madrid están lejos.

Sefiani cree que es “natural que las relaciones entre España y Marruecos sean muy buenas” porque según el alcalde de Chauen tenemos “relaciones económicas muy buenas y relaciones históricas”.

El acalde de Chauen destacó durante la conversación que España haya sido el primer proveedor de Marruecos por primera vez en la historia del reino, y “sustituyendo a Francia”.

Pero a veces los choques entre los gobiernos afectan a las relaciones entre norte de Marruecos y sur de España, sin embargo este político emprendedor tiene claro que “la razón de vecindad no tiene otra solución que trabajar juntos” y asevera que así pueden “hacer muchas cosas”.

Los esfuerzos de la cooperación transfronteriza se han visto beneficio en el ámbito cultural que poco a poco se rasca más en una historia de Andalucía perdida en el norte de Marruecos y olvidada por los libros de texto que miran al norte que está más lejos que el sur.

Sahara Occidental

Los socialistas europeos a favor de Marruecos pese a…

Un representante de CEAS-Sahara entrega el documento a líder de los socialistas europeos. / J.Z
Un representante de CEAS-Sahara entrega el documento a líder de los socialistas europeos. / J.Z

Ya hace tiempo que los socialistas, no solo en España, decidieron que Europa tiene que estar al lado de Marruecos pese a quién pese y sin solventar un conflicto que dura casi cuatro décadas como es el del Sahara Occidental.

El acuerdo pesquero entre la UE y el reino Alauí es el más importante de los lazos entre las dos orillas y representa la superioridad económica de Marruecos en el Magreb. Pero el acuerdo, que ya fue rechazado, incluía las aguas de un territorio considerado por las Naciones Unidas como “No Autónomo”, y cuyo propietario vive refugiado en la hamada argelina.

Pero el presidente del Grupo Socialistas y Demócratas (S&D) en el Parlamento europeo, el austríaco Hannes Swoboda, señaló en rueda de presna que su grupo votará a favor del acuerdo pesquero tras la pregunta de este periodista.
Swoboda dijo que «no ayudamos a los saharauis rechazando el acuerdo», y destacó que no veía “ninguna contradicción entre los acuerdos pesqueros y los intereses de los saharauis».

Además dejó entre bambalinas la necesidad de que el acuerdo pesquero repercuta sus beneficios entre la población del Sahara Occidental, acción que según el socialista debe de jugar España.

Los argumentos del socialista no convencen al pueblo Saharaui que ayer bajo el movimiento solidario entregó un documento a Swoboda para pedirle que cese el expolio de recurso en el Sahara y que no apoyen los acuerdos pesqueros en la votación en el parlamento europeo.

El mensaje era claro, lo mismo que reivindicaban días atrás unas dos mil personas en Madrid, el acuerdo vulnera los derechos de los refugiados como propietarios legítimos de los recursos del territorio que ahora Europa pretende obtener.

El acuerdo pesquero permitirá regresar al caladero marroquí un centenar de buques pesqueros españoles, en su mayoría de carácter artesanal, con más de 700 tripulantes, principalmente de Andalucía y Canarias.

A finales de julio, UE y Marruecos lograron firmar un acuerdo de cuatro años y que costara un total de 160 millones euros, 40 por cada año, una cifra que alarma a los expertos que ven un gasto innecesario que genera trabajo pero no beneficios.

Es más, si el dinero invertido al año para el acuerdo se repartiera entre la flota, cabrían a un sueldo de más de 4.000 euros mensuales cada uno de los pescadores, cuyo sueldo raras veces supera el mínimo. Según el el Ministerio de esta cantidad, 16 millones corresponden a derechos de acceso y 14 millones en concepto de apoyo sectorial y cooperación al sector pesquero marroquí, y 10 millones procedentes de los pagos por licencias de los diferentes operadores que, en el caso español, suponen un incremento aproximado del 12%.

Pero lo que ha indignado a los solidarios con el Sahara no es el rechazo al expolio sino la ostentación de solidaridad con este pueblo del austriaco Hannes Swoboda, que destacó en la rueda de prensa la visita de sus eurodiputados al Sahara Occidental y la próxima visita a los campamentos de refugiados.

Exteriores

Margallo y Rajoy reciben al ministro de exteriores marroquí

Mariano Rajoy ha recibido esta mañana en La Moncloa al ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación del Reino de Marruecos, Salaheddine Mezouar.
Mariano Rajoy ha recibido esta mañana en La Moncloa al ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación del Reino de Marruecos, Salaheddine Mezouar.

El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, ha mantenido una reunión de trabajo con su homólogo de Marruecos, Salaheddine Mezouar, en su primera visita a nuestro país. Durante la misma, el ministro Mezouar ha sido recibido en audiencia por Su Majestad el Rey y ha mantenido un encuentro con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el presidente del Senado, Pío García-Escudero.

La reunión de los ministros de Asuntos Exteriores ha permitido que aborden, por primera vez, tras la reciente toma de posesión del ministro Mezouar, los múltiples temas de la agenda bilateral, en el clima de buen entendimiento que preside la relación entre dos países que son amigos y vecinos.

En el ámbito político, ambos han destacado el impulso a la relación bilateral que supusieron tanto la visita de S. M. el Rey a Marruecos en julio de 2013 como la pasada Reunión de Alto Nivel, que tuvo lugar hace un año.

Respecto a las relaciones económicas y comerciales, el ministro García-Margallo ha destacado la importancia que Marruecos tiene para España, tanto en comercio como inversiones. Marruecos es nuestro segundo socio bilateral fuera de la UE, tras Estados Unidos, y más de 800 empresas españolas tienen inversiones en el país vecino. El crecimiento continuado de los intercambios en los últimos años ha situado a España en 2012 como primer socio comercial de Marruecos, país con el que mantienen relaciones 20..000 empresas españolas. Ambos Ministros han revisado algunos aspectos de la presencia de empresas españolas pendientes de resolver.

Los ministros han coincidido en destacar el éxito del I Foro Económico del 5+5, celebrado la víspera en Barcelona, como impulso hacia una mayor integración económica en el Mediterraneo Occidental.

También han abordado la situación regional en el Magreb, donde Marruecos es ejemplo de estabilidad y apertura. Han analizado la crisis del Sahel y sus efectos en la región. Respecto a la situación en Siria, ambos se han mostrado esperanzados por la Resolución 2118 del Consejo de Seguridad, que ha abierto la puerta a la eliminación del arsenal químico del régimen sirio. Por otra parte, se han felicitado del progreso de la iniciativa hispano-marroquí de Mediación en el Mediterráneo y saludan la organización de un nuevo seminario internacional en Eslovenia en 2014.

Respecto al Sahara Occidental, ambos ministros han intercambiado puntos de vista sobre el estado actual de la cuestión en el contexto de la nueva gira regional del Enviado Personal del Secreatrio General de Naciones Unidas, Christopher Ross.

Por último, los ministros han abordado la relación de Marruecos con la Unión Europea. España saluda y alienta la voluntad de Marruecos de estrechar sus privilegiados vínculos con la Unión Europea y manifiesta su deseo de que la aprobación del nuevo Protocolo de Pesca Unión Europea-Marruecos se pueda producir en los próximos meses dada la importancia que reviste tanto para Marruecos como para la flota española.

Marruecos

El acuerdo pesquero UE-Marruecos es un pacto político más…

Cañete en la rueda de prensa del acuerdo pesquero. / MAGRAMA
Cañete en la rueda de prensa del acuerdo pesquero. / MAGRAMA

Marruecos ya la Unión Europea, premio Nobel de la Paz, han firmado hoy en Marruecos un nuevo acuerdo pesquero que permitirá regresar al caladero marroquí un centenar de buques pesqueros españoles, en su mayoría de carácter artesanal, con más de 700 tripulantes, principalmente de Andalucía y Canarias.

Tras un año y medio de lucha diplomática, y bajo la presión española, se ha conseguido firmar un acuerdo con el vecino Alauí de cuatro años y que costara un total de 160 millones euros, 40 por cada año, una cifra que alarma a los expertos que ven un gasto innecesario que genera trabajo pero no beneficios.

Es más, si el dinero invertido al año para el acuerdo se repartiera entre la flota, cabrían a un sueldo de más de 4.000 euros mensuales cada uno de los pescadores, cuyo sueldo raras veces supera el mínimo. Según el el Ministerio de esta cantidad, 16 millones corresponden a derechos de acceso y 14 millones en concepto de apoyo sectorial y cooperación al sector pesquero marroquí, y 10 millones procedentes de los pagos por licencias de los diferentes operadores que, en el caso español, suponen un incremento aproximado del 12%.

Ahora, el ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Arias Cañete,  espera que haya una acción concertada en el Parlamento Europeo para agilizar el proceso de ratificación del acuerdo y que pueda entrar en vigor lo antes posible, “ya que este protocolo cumple totalmente el mandato negociador del Consejo de Ministros de la Unión Europea”.

EL GASTO DE LA UE EN EL ACUERDO SUPONDRÍA UN SUELDO DE 4.000€ AL MES PARA CADA UNO DE LOS PESCADORES DURANTE UN AÑO

Entre las novedades de este acuerdo,  los cerqueros artesanales del norte (20 barcos de Barbate con 350 tripulantes), se ha ampliado la zona de pesca hacia el sur, hasta alcanzar el paralelo 33º,25’ N, para un máximo de cinco barcos simultáneos de esta flota, con posibilidad de aumentar esta cantidad el próximo año.

Los palangreros de fondo artesanales del norte (24 barcos de Algeciras, Barbate y Conil, con unos 150 tripulantes), ahora dispondrán de cinco licencias adicionales con respecto al protocolo anterior. Cuatro de estos barcos podrán pescar también más al Sur, como en el caso de la categoría 1, en el primer año de vigencia. Salvo informe científico en contrario, a partir del segundo año podrán ser más los barcos que vayan al sur.

Esto conlleva que los que hasta ahora solían trabajar en el punto de Kenitra (Marruecos), ahora puedan llegar hasta aguas del Sahara Occidental, que se encuentra en proceso de descolonización por parte de las Naciones Unidas, desde que el territorio fue abandonado por España en 1975

El último de los acuerdos, inhabilitado por el Parlamento Europeo, permitía pescar en aguas del Sahara Occidental, pero según el acuerdo, la pesca puede realizarse en “aguas que se encuentren bajo la soberanía o jurisdicción del Reino de Marruecos”, para ello la UE acordó que los beneficios debían repercutir sobre la población autóctona, divididos entre los campamentos de refugiados de Tinduf y la ocupación marroquí,  algo que los eurodiputados no han podido corroborar y que Marruecos no ha permitido investigar.

Este acuerdo es considerado por asociaciones y ONG internacionales como un gasto inútil que discrimina a la población saharaui que se encuentrarefugiado en el desierto de Argelia a la espera de volver y lograr explotar sus recursos mientras sufren serios problemas de higiene y alimentarios.

Andalucía

Cae en un 8% las migraciones de varones marroquíes…

Retrato fotográfico de una mujer marroquí. / Casa Mediterráneo
Retrato fotográfico de una mujer marroquí. / Casa Mediterráneo

Marruecos es el principal país emisor de inmigrantes a nuestra comunidad según los datos del último padrón del INE, donde estos representaban casi el 17% superando levemente a la comunidad inglesa.
Pero la crisis económica originada desde el año 2008 ha afectado a los flujos migratorios entre el Norte de Marruecos y Andalucía, en concreto dicha influencia se ha visto en el perfil demográfico de la inmigración.

Según un estudio sobre los flujos migratorios del proyecto MENARA, perteneciente ala Fundación Tres Culturas del Mediterráneo, en estos cinco años de crisis en Andalucía ha habido un cambio cualitativo de marcada importancia donde la población masculina marroquí ha reducido su peso respecto de las mujeres migrantes marroquíes.

Si en 2006 el peso de los hombres en Andalucía representaba el 68% y el de las mujeres el 32%, en 2012 la proporción es de 60% y 40% respectivamente, es decir, ha caído en un 8% los inmigrantes varones pero se ha recuperado en las féminas.

Este cambio se ha originado por los cambios sufridos en el campo andaluz, uno de los principales motivos de los “efectos llamada” que originaron los movimientos migratorios entre Marruecos y la comunidad autónoma. Es más, las provincias donde más residentes marroquíes tenían en el último censo del padrón del INE eran Almería y Jaén, principales fuentes de agricultura en nuestra comunidad.

La entrada de hombres ha disminuido más que la entrada de mujeres (casi el 50% para los varones y un 33% para el caso de las mujeres) mientras que las salidas muestran un aumento en los porcentajes cercanos al 50% en ambos casos.

La caída del burbuja inmobiliaria ha afectado a los inmigrantes marroquíes, cuyos varones han sido la que más ha sufrido la pérdida de puestos de trabajo, por su parte las mujeres han aumentado su tasa de empleo según el estudio.

La principal razón del aumento de la migración femenina responde a que ya no solo llegan a conectadas a movimientos conyugales y familiares, sino que en estos últimos años ha habido inmigración femenina obligada a la mejora económica, espíritu ligado a la migraciones masculinas en Marruecos.

Estos movimientos migratorios han beneficiado fuertemente a la elaboración de un nuevo rol de la mujer en la sociedad marroquí, que empieza a normalizar el hecho de que estas trabajen fuera del hogar, incluso en el extranjero.