Europa

5.000 vidas ahogadas

Se teme que alrededor de 100 personas hayan perdido la vida ahogadas en el mar Mediterráneo el pasado 22 de diciembre. Los guardacostas italianos llevaron a cabo cuatro operaciones de rescate en el Mediterráneo central. Estas últimas tragedias elevan la cifra de fallecidos en el Mediterráneo durante este año a más de 5.000. Esta es la peor cifra anual de víctimas que se haya observado jamás.

Según los guardacostas italianos, se habrían producido dos incidentes diferentes con embarcaciones neumáticas que se habrían hundido y sus pasajeros habrían caído al mar. La primera de ellas transportaba a entre 120 y 140 personas, entre las que habría un elevado número de mujeres y niños. Sólo 63 personas han sobrevivido. La segunda embarcación transportaba a unas 120 personas de las cuales 80 pudieron ser rescatadas por los guardacostas.
Por otro lado, alrededor de 175 personas han sido rescatadas de otra embarcación neumática y de una barca de madera.

Los guardacostas desembarcaron en Trapani, Sicilia a 264 personas la pasada noche, mientras que en el transcurso de las operaciones se recuperaron 8 cuerpos sin vida.

Esta situación pone de manifiesto la urgente necesidad de que los Estados incrementen las vías legales de admisión de refugiados, tales como el reasentamiento, el patrocinio privado, la reunificación familiar y los programas de becas para estudiantes, entre otros, de forma que las personas en necesidad de protección internacional no tengan que recurrir a viajes peligrosos ni a traficantes.

Las causas del alarmante incremento de muertes este año son múltiples, pero parece que están relacionadas con la peor calidad de las embarcaciones utilizadas por los traficantes, las inclemencias meteorológicas y las tácticas utilizadas por los traficantes para evitar ser detectados por las autoridades. Entre otras, está el envío de un gran número de embarcaciones de manera simultánea, lo que dificulta el trabajo de los equipos de rescate.

Un refugiado lucha por sobrevivir tras naufragar junto a 55 personas en el Mediterráneo. / Sergio Rodrigo Andalucía

Las voces del Mediterráneo

El pasado mes de octubre de 2016 se vivió la llegada más amplica de migrantes por la ruta del Mediterráneo andaluz que ha crecido un 50%. Unos 200 migrantes fueron interceptados en las costas españolas el 3 de octubre.

Entre ellos se encontraba un joven albino de Islas Comoras que lleva dos años viajando por África para pedir protección en Europa, debido a la persecución que sufren las personas con esta condición.

Andalucía

La ONU vuelve a instar a Europa reforzar protección…

Migrantes procedentes de Siria, Iraq y Afganistán son recibidos por voluntarios al desembarcar en la isla griega de Lesbos. Foto de archivo: UNICEF/Ashley Gilbertson
Migrantes procedentes de Siria, Iraq y Afganistán son recibidos por voluntarios al desembarcar en la isla griega de Lesbos. Foto de archivo: UNICEF/Ashley Gilbertson

El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), presentó este lunes a la Unión Europea el documento ‘Mejorando la Protección de los Refugiados en la UE y en el Mundo’, para pedirle una profunda reforma del compromiso global de Europa con los refugiados, que también incluya el sistema europeo de asilo.

Acnur insta a Europa a que ofrezca un apoyo más estratégico y centrado en los países de origen, asilo y tránsito de refugiados, así como a que revise sus planes de contingencia para poder dar respuesta a llegadas numerosas de refugiados e inmigrantes, y a que ponga en marcha un sistema de asilo más eficiente y mejor gestionado.

Asimismo, pide una mayor inversión por parte de los Estados miembros en la integración de refugiados, que incluya los aspectos de vivienda, empleo y formación lingüística. “El año pasado Europa fracasó a la hora de implementar una respuesta colectiva y bien gestionada a los desafíos planteados por la llegada de más de un millón de refugiados e inmigrantes”, señaló el comisionado de Acnur, Filippo Grandi.

En este sentido, hizo hincapié en que “esto ha tenido como resultado escenas de caos en las fronteras, generando una crisis de confianza por parte de los ciudadanos respecto a la capacidad de los gobiernos para gestionar la situación” y “ha beneficiado a aquellos que quieren convertir a los refugiados en las cabezas de turco”.

“Es importante que los Estados miembros de la UE demuestren, mediante una acción colectiva, que Europa es capaz de gestionar los movimientos de refugiados de una manera eficaz y basada en el respeto de sus principios, contribuyendo a estabilizar los flujos de refugiados a largo plazo a través de un compromiso externo más estratégico, al tiempo que sigue acogiendo a los refugiados en Europa”, manifestó.

Las propuestas del documento incluyen “un sistema de registro común europeo, procedimientos más rápidos y sencillos para la determinación de la condición de refugiado, una priorización de la reunificación familiar, un enfoque común sobre los menores no acompañados y separados, así como un mecanismo de distribución para los Estados miembros que experimenten una elevada presión por recibir un número importante de llegadas”.

Grecia

La UE fracasa en su intento de frenar a…

Migrantes y refugiados cruzan el Mediterráneo. Foto: ACNUR/A. D’Amato
Migrantes y refugiados cruzan el Mediterráneo. Foto: ACNUR/A. D’Amato

Los supuestos esfuerzos de la Unión Europea para frenar el flujo migratorio bajo el pretexto de conbatir las redes de trata ha vuelto a fracasar en los primeros 9 meses del año, donde el flujo de personas llegó a más de 300.000 personas principalmente por el Mediterráneo central.

Aunque el acuerdo entre la UE y Turquía ha reducido a más del 90% el flujo en el Egeo, la realidad según ACNUR, la cifra es más baja que la registrada durante ese mismo periodo durante 2015, pero superior a los más de 216.000 migrantes que llegaron en todo 2014.

“El número de personas que fallecieron o desaparecieron entre enero y septiembre es sólo un 15% menor que la totalidad de bajas durante el año pasado. De seguir a este ritmo, 2016 será el año más mortífero del que se tenga registro en el Mediterráneo”, estimó el portavoz de ACNUR, William Spindler, quién ademas advirtió en cambio del creciente peligro mortal que entraña la travesía.

El portavoz indicó que Italia y Grecia continúan siendo los países principales de llegada de los refugiados, aunque con diferentes patrones.Las cifras en Italia durante los primeros 9 meses del año se mantuvieron casi idénticas respecto a 2015, con unas 130.000 llegadas, sin embargo los número sufrieron una fuerte caída en Grecia.

El país heleno acogió a 165.000 refugiados de enero a septiembre, para una disminución de un 57% respecto a 2015, cuando se registraron más de 385.000 llegadas. El 68% de los migrantes proviene de Siria, Afganistán, Iraq, Nigeria y Eritrea.

La ONU ha insistido en dar respuesta a la situación ante el compromiso de minimos acordador por Europa, pero hasta el momento, el plan adoptado por la Unión Europea y sus Estados miembros que debía reubicar a unos 160.000 refugiados, ha trasladado a menos de 5.000.

Europa

Newman, hijo del Mediterráneo

Newman, recién nacido a bordo del Aquarius. Alva White/MSF
Newman, recién nacido a bordo del Aquarius. Alva White/MSF

Apenas 24 horas antes de nacer, sus padres y sus hermanos mayores, Victory (7 años) y Rollres (5 años), fueron rescatados de una balsa de goma donde viajaban hacinados junto a decenas de personas. Cuando nació el bebé, el Aquarius llevaba a bordo 392 personas procedentes de dos lanchas neumáticas rescatadas ayer y de una transferencia de rescatados por parte de otro buque. 155 eran menores de edad, 141 de ellos viajaban solos, sin padre ni familiar alguno. Entre los menores rescatados hay 11 niños menores de 5 años y 4 niños menores de un año.

“Fue muy estresante y duro pasar todo ese tiempo en ese bote de goma. Iba sentada en el suelo de la embarcación junto con otras mujeres y niños. El pánico me hizo romper aguas. Podía sentir el movimiento del bebé; bajaba y subía una y otra vez. Llevaba tres días con contracciones”, explica Faith, la mamá del pequeño.

Jonquil Nicholl, matrona de MSF, asistió el parto: “Ha sido un alumbramiento muy normal en unas condiciones peligrosamente anormales. Me horroriza la idea de pensar qué hubiese ocurrido si el bebé hubiera llegado 24 horas antes; en ese bote de goma inestable, repleto de gasolina en la parte inferior donde iba sentada la madre, hacinado y sin espacio para moverse, a merced del mar. 48 horas antes, todos esperaban en una playa de Libia sin saber qué iba a ser de ellos. ¿Cómo pueden seguir pasando cosas como esta en 2016? Estas familias, esta población vulnerable, estas mujeres embarazadas, estos niños tan pequeños y esos bebés no nacidos que se ven obligados a arriesgar sus vidas en el Mediterráneo cuando deberían estar recibiendo asistencia y protección”.

Desde la reanudación de las operaciones de rescate el 21 de abril, los equipos de MSF a bordo del Dignity, el Bourbon Argos y el Aquarius (este último en colaboración con SOS Méditerranée) han rescatado a 12.003 personas en 89 operaciones de salvamento diferentes.

New arrival on Aquarius

Inmigración

El día más largo del Mediterráneo

Rescuing the first people and bringing them safely back on board of Dignity I
Rescuing the first people and bringing them safely back on board of Dignity I

Casi 6500 vidas fueron rescatadas en el Mediterráneo en el día más largo para las miles de personas que trataron de cruzar hacia el sur de Europa. Cerca de 6.500 atravesaron la ruta más peligrosa del mundo en 40 embarcaciones de plástico y de madera. 

Huyen de la guerra, la violencia, la pobreza y el expolio. Son 6500 vidas que pudieron perderse en el fondo del mare nostrum, sin embargo el día más largo de la historia del flujo migratorio en el mediterráneo deja el trauma a miles de personas de origen subsaharianos, entre ellos menores y mujeres.

El barco de búsqueda y rescate de Médicos Sin Fronteras, Dignity I, intervino ayer en el salvamento en aguas del Mediterráneo central de unas 3.000 personas que viajaban a bordo de 20 balsas neumáticas y de varias embarcaciones de madera, una de las cuales transportaba entre 600 y 700 personas.

La de ayer es la mayor operación en la que hemos participado en una sola jornada desde que pusimos en marcha la misión de localización y salvamento hace un año”, afirma Nicholas Papachrysostomou, coordinador del proyecto del Dignity I. “Las increíbles cifras hablan de la desesperación que la gente padece en sus países de origen y que les empuja a arriesgar sus vidas para buscar protección en Europa. El Dignity I tiene capacidad para 400 personas pero debido a la situación extrema que vivimos ayer subimos a bordo a 435 hombres, mujeres y niños. Así mismo, tuvimos que emplear todos los chalecos salvavidas con los que contamos: 700, para asistir a otras embarcaciones en peligro. También utilizamos nuestras lanchas rápidas para transferir cuanta gente era posible a otros navíos que operaban en la zona”.

Rescatamos a un bebé prematuro, de tan sólo cinco días, y a su hermano gemelo, que habían nacido tras ocho meses de gestación”, explica Antonia Zemp, responsable del equipo médico. “La madre viajaba sola. Uno de los bebés vomitaba, sufría hipotermia y no reaccionaba. Tras un primer triaje y dado que su frágil estado de salud le habría impedido sobrevivir al viaje a Italia en nuestro barco, decidimos solicitar su evacuación médicaFinalmente, fue transferido junto a su hermano y su madre a otro buque que les llevaría a tierra con rapidez”, añade Antonia Zemp.

El equipo médico de MSF trató a pacientes por deshidratación, hipotermia, diarrea, fiebre y enfermedades epidérmicas. De las 435 personas rescatadas, 353 eran hombres y 82 mujeres. Entre ellos se incluyen 110 menores, 92 de los cuales viajaban solos, y 13 niños de menos de cinco años.

“De acuerdo con la Guardia Costera italiana, cerca de 6.500 personas fueron rescatadas ayer en el Mediterráneo en 40 operaciones de salvamento diferentes”, declara Papachrysostomou. “Esto prueba que la reacción de la Unión Europea a esta crisis que se desarrolla dentro y a la puerta de sus fronteras ha fallado a la hora de responder a las necesidades humanitarias y de protección de refugiados, solicitantes de asilo y migrantes. 3.167 personas han perdido la vida en 2016 según la Organización Internacional de las Migraciones (OIM) y ACNUR. La Unión Europea debe establecer medidas que faciliten alternativas, legales y seguras para que refugiados y migrantes accedan a la protección y seguridad que buscan desesperadamente”.

Europa

Las guerras y la persecución dejan 65 millones de…

Refugiados de Burundi que acaba de salir de la orilla del lago Tanganyika. Luego serán trasladados al campo de refugiados de Tanzania Nyaragusu . / ACNUR
Refugiados de Burundi que acaba de salir de la orilla del lago Tanganyika. Luego serán trasladados al campo de refugiados de Tanzania Nyaragusu . / ACNUR

El conflicto y la persecución provocaron que el desplazamiento forzado aumentase considerablemente en 2015, alcanzando el mayor nivel jamás registrado y provocando un sufrimiento humano tremendo, de acuerdo con el informe presentado hoy por ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados.

El informe anual de ACNUR Tendencias Globales, que analiza el desplazamiento forzado en todo el mundo basándose en datos de gobiernos, agencias socias, incluyendo el Observatorio sobre Desplazamiento Interno y en los datos de la propia organización, arrojaba que 65,3 millones de personas se encontraban desplazadas a finales de 2015, en comparación con los 59,5 millones sólo 12 meses antes. Esta es la primera vez que se supera el umbral de los 60 millones.

El total de 65,3 millones comprende los 3,2 millones de personas en países industrializados que a finales de 2015 esperaban una resolución sobre sus solicitudes de asilo (el mayor número global registrado por ACNUR), los 21,3 millones de refugiados en todo el mundo (1,8 millones más que en 2014, y la cifra de refugiados más alta desde principios de los 90), y los 40,8 millones de personas que se habían visto forzadas a huir de sus hogares, pero que permanecían dentro de las fronteras de sus propios países (un incremento de 2,6 millones respecto a 2014, y el mayor número registrado).

Comparadas con los 7.349 millones de habitantes de la Tierra, estas cifras muestran que 1 de cada 113 personas en el mundo es actualmente solicitante de asilo, desplazada interna o refugiada –un nivel de riesgo del que ACNUR no tiene precedentes. En total, el número de desplazados forzosos hoy es mayor que la población de países como Reino Unido, Francia o Italia.

El desplazamiento forzado ha ido en aumento en la mayoría de las regiones, por lo menos, desde la mitad de la década de los 90, pero en los últimos cinco años el ritmo de ascenso ha incrementado. Esto es debido principalmente a tres motivos: las situaciones que provocan los grandes flujos de refugiados están durando más (por ejemplo, los conflictos en Somalia o Afganistán están ahora en su tercera y cuarta década, respectivamente); con frecuencia surgen nuevos conflictos o se reactivan otros ya existentes (hoy el mayor es Siria, pero también en los últimos cinco años Sudán del Sur, Yemen, Burundi, Ucrania, República Centroafricana, etc.), y el ritmo al que se han encontrado soluciones para refugiados y desplazados internos ha mostrado una tendencia a la baja desde el final de la Guerra Fría. Tan solo hace 10 años, a finales de 2005, ACNUR registraba una media de 6 personas desplazadas cada minuto. Hoy el número es de 24 por minuto – casi el doble de la frecuencia habitual con la que un adulto respira.

“Cada vez hay más gente desplazada por la guerra y la persecución, y esto ya es preocupante, pero los factores que ponen en peligro a los refugiados también se están multiplicando”, dijo el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados, Filippo Grandi. “En el mar, un número escalofriante de refugiados e inmigrantes están muriendo cada año; en tierra, las personas que huyen de la guerra están encontrando su camino bloqueado por fronteras cerradas. Las políticas están gravitando hacia posturas contrarias al asilo en algunos países. La voluntad de las naciones para trabajar unidas, no sólo por los refugiados sino en pos del interés colectivo de la humanidad, se está poniendo a prueba hoy, y es precisamente este espíritu de unidad lo que se necesita con urgencia que prevalezca”, añadió Grandi.