Inmigración

Carne de la mar

Balseros subsaharianos frente a las costas de Tarifa. / S.M
Balseros subsaharianos frente a las costas de Tarifa. / S.M

Miles de personas se juegan la vida en el mar mediterráneo convirtiéndose en carne para una mar agresiva cuyo oleaje vence las del humano que cruza bajo neumáticas que son devoradas ante el fuerte oleaje y cuyo propietario parece ser el capital.

Un mar repleto de cadáveres que hacen del mediterráneo el mayor cementerio líquido de la historia de la humanidad y cuya solución es forrar a los países del norte de áfrica para que frenen los movimientos migratorios.

Al otro lado de la orilla sur erigen muros violentos que pretenden frenar pero que solo ocasionan más víctimas, volcando a estos jóvenes «aventureros» a ser de nuevo carne de una mar.

Las migraciones no se combaten como decía el primer ministro italiano Letta o el ministro del interior español, las migraciones son naturales y sino que se lo digan a los centenares de miles de griegos, portugueses o españoles que pasean con títulos de segunda en Inglaterra, Alemania o Francia.

Personas que sueñan con una mejor vida para ellos y sus familias, personas que huyen de guerras y hambrunas, no se pueden combatir. Se combaten las hambrunas y las guerras.

Reitero. El sueño se ve ahogado en la mar mientras los responsables políticos europeos y sus cómplices magrebíes se gastan miles de euros robados que obtienen de tases de minerales, pescados o frutos que tren del continente africano.

Inmigración

Unas 225 personas perdieron la vida al intentar llegar…

Grupo de subsaharianos a su llegada a la costa andaluza. / Guardia Civil
Grupo de subsaharianos a su llegada a la costa andaluza. / Guardia Civil
A pesar de los recortes se han invertido unos 50 millones en reforzar la Frontera Sur de la Unión Europea

Durante el año 2012 perdieron la vida unos 225 migrantes al intentar llegar al territorio de la Premio Nobel de la Paz, UE. La respuesta de la UE y de España sigue siendo la de enrocarse en sus miedos, haciendo más altos e inaccesibles los muros, externalizando la gestión de los flujos y haciendo del internamiento de inmigrantes el pivote de la política migratoria.

En plena vorágine de recortes para toda la ciudadanía, se contempla sin embargo una importante partida  de 50 millones de euros para hacer frente a la llegada de inmigrantes irregulares, sien embargo casi 7.000 migrantes llegaron a España en 2012 arriesgando su vida.

Por  tercer  año  consecutivo  ha  vuelto  a  aumentar  el  número  de  personas muertas o desaparecidas cuando intentaban llegar a España, según los datos del seguimiento de la APDHA. Hemos pasado de los 131 muertos o desaparecidos en 2010, a 198 en 2011, alcanzando los 225 en 2013. Y se trata tan sólo de los datos que la APDHA ha podido contrastar, y es que la verdad de esta demencial escalada de personas que pierden la vida nunca se sabrá y será con toda seguridad mucho más elevada que los datos que proporcionamos.

No es casual que la mayoría de las personas detectadas lo sean en el intento de alcanzar la península desde Marruecos (156 personas), ni que apenas se pueden proporcionar datos de las muertes producidas en el desierto del Sahara, donde según distintas ONG es donde más vidas se pierden en el intento de llegar a Europa, más que en el mar mediterráneo.

Inmigración

Los migrantes miran a Europa

Migrantes aguardan a las puerta de la Jefatura de la Policía de Melilla solicitando ser trasladados a la península. / J.P
Migrantes aguardan a las puerta de la Jefatura de la Policía de Melilla solicitando ser trasladados a la península. / J.P

Llegar a España es un objetivo principal para millones de personas en toda África, sin embargo la gran parte de estos migrantes su destino no es la península sino el resto de los países de la Unión Europea.

El movimiento natural de personas se ha producido desde antaño, pero en las últimas décadas España ha sido uno de los principales países receptores de migrante no obstante la crisis y el propio éxodo de migrantes del país están convirtiendo a España en un país de paso para las migraciones.

Uno de los datos que puede reflejar este fenómeno es la afiliación a la Seguridad Social de ciudadanos extranjeros, que descendió en el primer mes de 2013 en 45.495 ocupados, lo que equivale al -2,76%. En términos anuales, la evolución de la tasa de afiliación de personas de procedencia extranjera continúa siendo negativa y muy por encima de la del total de empleados.

La variación anual entre el colectivo registró una bajada del -5,31% (-89.831) frente al -4,59% del conjunto del Sistema. Ambos indicadores revelan que se mantiene la tendencia ya apuntada en los meses anteriores, en el sentido de que la pérdida de empleo está afectando con mayor intensidad a los trabajadores extranjeros que a los nacionales.

Y es que de los entorno a seis millones de extranjeros que viven en España 1.600.355 están trabajando de forma legal. No obstante, la meta de arribar a España sigue siendo el objetivo, ya sea por las costas a través de embarcaciones o por los enclaves españoles de Ceuta y Melilla, sobre todo este segundo donde en sus alrededores aguardan la mayoría de migrantes subsaharianos con destino Europa.

Los países de la región del subsahara siguen siendo las zonas que más inmigración de riesgo provoca, ya que la mayoría expone su vida y su capital para conseguir su objetivo bajo ningún otro concepto. Pero su destino son muy diversos como Alemania, Francia, Holanda o incluso Noruega, como afamaban algunos migrantes en mi última visita a la ciudad autónoma de Ceuta.

Inmigración

Cuatro tunecinos esperan en Melilla llegar a Europa

Los ciudadanos tunecinos en la Plaza de España. / S.R

Desde hace más de un año estos cuatro ciudadanos tunecinos que aparecen en la imagen están esperando en Melilla llegar a Europa con el objetivo de cumplir sus sueños y reunirse con sus familiares.

Salieron de la turbia Túnez el 24 de octubre de 2011, en su capital tomaron un vuelo con destino Casablanca, ciudad de partida de un viaje que los atrapó en la ciudad autónoma de Melilla cuando llegaron a pie.

“ Pasamos la frontera de Beni Enzar a pie y nos quedamos en el CETI” comenta Hosni Dkhili en un perfecto francés, y es que son muchos los ciudadanos magrebies que cruzan la frontera a pie con un documento falso, en muchos casos pagan hasta 500€, y su parecido con los vecinos marroquíes confunde a la policía fronteriza.

Hosni tiene 26 años y su objetivo, a igual que sus compañeros, es Europa. Sin embargo, sigue prisionero en Melilla a través del régimen concedido por el CETI, y a la espera de una resolución que les lleve a su destino, que parece no llegar.

Ante sus frustraciones se han unido a dos argelinos para protestar por su situación instalando un pequeño campamento protesta en la céntrica Plaza de España de Melilla, donde exigen la regularización de su situación y llegar a la península.

Magreb

La integración de los magrebíes en norte Europa

Cartel de la estación de trenes de Gare du Nord

Hace unos días que llegué de Bruselas, capital de Bélgica y ciudad administrativa de la Unión Europea. La verdad que según donde te muevas puedes tomar con situaciones muy dispares, por ejemplo si caminas cerca de la comisión encontraras muchos trajes y maletines cargados de eurobonos.

Sin embargo, moverte por la zona de Gare du Nord todo cambia, allí, un barrio de migrantes, puedes encontrar contrastes muy extraños como escaparates con lencería erótica o prostitutas (en Bélgica esta legalizada), y locales con escaparates con maniquíes con niquab y hiyab, estos establecimiento son de la comunidad musulmana en Bruselas, generalmente magrebíes y otomanos.

Esto me llevó a entender una cosa los primeros días, la diversidad cultural de la ciudad, pero conforme fueron pasando los días la ciudad demostró que los colectivos se movían en áreas y círculos sociales distintos. Es decir, los argelinos se juntan con argelinos y lo belgas con belgas, solo se rompe esta estratificación rutinaria cuando el estatus económico varia, algo difícil, sobre todo para los migrantes, en centro Europa.

Curiosamente, ayer me tocó escribí una noticia para el Grupo Joly, que hoy sale en muchos medios, acerca de los datos ofrecidos por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) en el que afirmaba que los migrantes españoles dicen que es más fácil integrarse en España que en el norte de Europa.

La investigación analizó el perfil de diferentes migrantes en España que habían pasado por 15 países europeos, en los que destacaban Alemania, Francia y Bélgica. Estos reconocieron la labor de la sociedad española, muy vinculada a las migraciones, en la integración destacando los cursos de idiomas.

Marruecos

Marruecos, primer beneficiario del programa del Consejo de Europa

Marruecos será el primer estado del Magreb que se beneficiará de un programa del Consejo de Europa dedicado a la consolidación de las reformas democráticas en los países del sur del Mediterráneo. Aunque también se destinará a Túnez, el acuerdo entre Europa y Marruecos se destinará, de común acuerdo, a proyectos de apoyo a las reformas democráticas, el buen gobierno y la independencia del poder judicial, durante tres años.

El Consejo de Europa, que incluye a 47 estados, apunta a construir sobre este programa conjunto con la Unión Europea, para ayudar a anclar los valores y prácticas democráticas en los países del sur del Mediterráneo.

El Secretario General del Consejo, Thorbjorn Jagland está convencido de que «la asociación con la Unión Europea nos permite combinar nuestros puntos fuertes en esta importante misión, apoyo a la transición política y democrática».

Hace unas semanas el Comisario de Ampliación y Política Europea de Vecindad, Stefan Fule, visitó Rabat cuyo objetivo fue este programa que pretende proporcionar el apoyo de la UE a los procesos de transición «y la reforma para cumplir con las expectativas de sus ciudadanos por los derechos democráticos, la dignidad y la prosperidad”.