Los sueños de Samir

Samir en el centro de la foto junto a sus compañeros de viaje en la isla italiana de Lampedusa. / Sergio Rodrigo
Samir en el centro de la foto junto a sus compañeros de viaje en la isla italiana de Lampedusa. / Sergio Rodrigo

Samir no se separa de ellos. Son como sus hermanos, salieron juntos de Eritrea hace un año ahora pasean por las calles de la isla italiana de Lampedusa. No llegan a los 18 años, aunque digan que son mayores de edad, pero desde que salieron no se han vuelto a separar.

Hace un año partieron de sus pueblo, Samir es musulmán y sus compatriotas cristiano y musulmán, para ellos no es un problema “somos eritreos, y somos como hermanos”, resalta. Su viaje comenzó huyendo hacia Sudán, allí pagaron por viajar a Libia, enrolados en un coche atravesaron la inmensidad del desierto del Sahara.

El paso fronterizo de Kufra en Libia entre Sudán, Egipto y Chad lo atravesaron sin parar, su objetivo era las costas de Libia para atravesar a Europa. Samir quiere llegar a Inglaterra, su sueño “jugar al fútbol en el Liverpool”.

Desde su casa solía ver los partidos de la liga inglesa, a través de los canales árabes sintonizaba los encuentros. «Voy de viaje a Londres, y allí a Liverpool», quiere trabajar para poder seguir entrenado, un sueño difícil que le ha motivado hasta cruzar el mar más mortífero de las rutas migratorias del mundo.

La hambruna y la feroz pobreza que vive su país a causa de una de las peores dictaduras del mundo hacen que este joven salga de su país, pero su corta edad apenas le dejan ver una realidad que esta nublada por los sueños de un espíritu adolescente.

Tras varios meses y después de recopilar 1700 dólares, no confirma de dónde y cómo, paga una red que lo embarca en algún lugar de la costa libia hacia Europa. La barcaza, un pesquero como el que naufragó la madrugada del 18 al 19 de abril, se agolpan unos 600, todos del Cuerno de África relata el migrante quién además afirma que pasaron dos días a la deriva.

La Guardia Costiera italiana logró localizarlos y trasladarlos a Italia, su próximo objetivo es Roma, pero de momento pasea junto a sus hermanos por Lampedusa, al caer la noche se acerca a la iglesia del Lampedusa, allí se agolpan a la cabina y algunos hacen algunas llamadas. Su casa por estos días, el centro de migrantes de Lampedusa, están abarrotado y las colas en las cabinas se perciben desde fuera.

Llaman a sus padres y familiares, le dan la buena noticia. Han sobrevivido a la ruta de Mediterráneo. La noche del 18 al 19 más de 800 personas no lograron contarlo y ahora son papeles mojados en el fondo del mar.

Migrantes eritreos llaman a sus familiares en la isla de Lampedusa. / S. R
Migrantes eritreos llaman a sus familiares en la isla de Lampedusa. / S. R

Lampedusa eje de las migraciones

Miles de migrantes en situación irregular se encuentran retenidos en un centro especial de Lampedusa. Defensores de derechos humanos denuncian situación de hacinamiento en dichos espacios. Mientras, la Unión Europea informó que analiza la posibilidad de bombardear las embarcaciones usadas por las mafias de tráfico de personas en Libia.

Mediterráneo y sus 10.000 vidas

La Guardia Costera italiana ha rescatado en menos de una semana a casi 10.000 mujeres, hombres y menores que huyeron de la orilla meridional del Mediterráneo. La cifra da la medida del aumento abrupto de las llegadas que se registra desde el comienzo de la primavera, y más de 400 personas han fallecido en su intento de llegar a Europa.

Cada historia de estas 10.000 vidas cobra sentio en el puerto. Esta madrugada, alrededor de la 1, un buque de la marina italiana atracaba en Lampedusa con 70 personas –principalmente refugiadas- rescatadas de una barca desinflada que había zarpado desde Libia. Entre las personas rescatadas y en estado de shock se encontraba un bebé de apenas seis meses con quemaduras graves en la mitad de su rostro. Los supervivientes contaron al personal de ACNUR que se produjo la explosión de una cocina de gas en el lugar donde los traficantes los retenían en Libia y que fueron embarcados sin haber recibido tratamiento para las heridas. Pasaron dos días a la deriva hasta que fueron rescatados.

El grupo estaba formado por 47 hombres, 21 mujeres y dos niños, principalmente de origen eritreo y somalí – dos países que generan refugiados.

Este último terrible incidente con traficantes de personas muestra la urgente necesidad de poner en marcha alternativas legales seguras para que los refugiados no se vean forzados a poner en riesgo sus vidas como en este caso.

Hasta la fecha, en 2015 alrededor de 35.000 refugiados e inmigrantes han cruzado el mar Mediterráneo (incluyendo los 23.500 que llegaron a Italia y más de 12.000 a Grecia). Al mismo tiempo, se tiene constancia de la muerte o desaparición de unas 950 personas en el mar.

ACNUR ha estado abogando por una respuesta integral y urgente por parte de la Unión Europea y de los Estados miembros para hacer frente a los desafíos planteados por los miles de refugiados y migrantes que arriesgan sus vidas tratando de llegar a Europa. 

ACNUR ha compartido propuestas específicas, entre las que se incluyen el establecimiento de una operación europea sólida de búsqueda y rescate, un posible plan de la UE para compensar a las compañías navieras que participan en el rescate de personas en el mar, el aumento de alternativas legales creíbles a los peligrosos viajes tales como el reasentamiento, visados humanitarias y otras soluciones innovadoras, así como el establecimiento de un programa piloto para la reubicación de los refugiados sirios que llegan a Italia y Grecia.

Migrantes supervivientes del naufragio rescatados por la marina italiana. / M.I

Más 400 muertos en el Mediterráneo

Este martes se confirmó la mayor tragedia de las migraciones en el Mar Mediterráneo cuando al menos 400 migrantes habrían fallecido en el naufragio de una barcaza que iba de Libia a la isla italiana de Lampedusa.

Los labios de Zaineb

Zaineb en un momento de la entrevista. / L.M
Ya camina por tierra firme, pero todavía sueña con los 14 kilómetros que le separaban de Europa. Partió sola hace años de Camerún para encontrar el dorado pero tras atravesar el estrecho junto a otros diez africanos en una pequeña balsa de plástico ahora cree que no merece la pena arriesgar tanto para un continente que no ofrece las oportunidades que pensaba y que le ha costado la vida a miles de personas en el mar.

“No fue fácil, nosotros sabíamos que arriesgábamos nuestras vidas por atravesar el mar mediterráneo, porque antes que nosotros fueron muchos los que murieron en este mar y perdieron sus vidas, antes que nosotros muchos niños murieron en el agua” relata Zaineb, ahora vive en un centro de Migrantes de Cruz Roja y como muchos jóvenes llegó a Marruecos para atravesar el estrecho.

Como ella son muchos los que se juegan la vida intentado atravesar el estrecho en los últimos años, sus labios relatan la historia de ella pero sabe que pronto serán sus hermanas las que quieran llegar a Europa. “Yo ya estoy en Europa y no puedo aconsejar a mis hermanas que arriesguen sus vidas en el mediterráneo”. Esta joven migrante como otros mucho creyó que encontraría respuestas a su vida pero ahora tras varios meses de su llegada pide a sus familiares que no arriesguen: “aquí no está el dorado”.

“Sé que no es fácil en nuestros países africanos pero no es la mejor opción (cruzar el mar), porque al final no encuentras una vida mejor”. Y es que el boca a boca en los países africanos, las redes sociales y hasta los medios de comunicación locales presentan a Europa como una realidad que aboca a muchos ciudadanos africanos a buscar respuestas a la situación de expolio continuado de sus naciones.

La realidad es que en Europa la crisis económica y social ha llevado a los gobiernos neolibreales a aplicar políticas contrarias a los derechos de los propios migrantes, como es el caso de la operación “Tritón” en el Mediterráneo que cuenta con apenas el 30% de los recursos de la operación “Mare Nostrum”.

Pero sin duda la guinda del pastel está en España, la aprobación de las devoluciones en caliente facilitan según los expertos la búsqueda de nuevas técnicas para cumplir sus objetivos, “no se pueden poner barreras al campo” señala Isaías Barrenada de la Red Euromediterránea de DDHH quién resalta que “no pueden despojarse de derechos fundamentales a las personas que se ven forzadas a migrar”.

Las políticas fronterizas favorecen a la ruta más peligrosa del mundo y es que en los primeros tres meses de este año han muerto 480 personas intentando alcanzar a la costa italiana, según la Organización Internacional de Migraciones (OIM), mientras que en el mismo periodo del año pasado murieron 50. Más de 10.000 consiguieron llegar, según datos del Ministerio de Interior.

En todo el año 2014 se estima que fallecieron ahogadas unas 3.500 personas, mientras 170.000 consiguieron llegar a Italia. Y es que las políticas de la UE engordan el cementerio líquido más grande del mundo.

Migrantes en el Mediterráno. Foto: ACNUR/A. Di Loreto

Crece un 43% el número de migrantes en la…

Un total de 1.469 inmigrantes fueron rescatados en las últimas horas mientras intentaban llegar desde Libia a las costas italianas, informó la Guardia costera italiana en una nota. La Marina Militar y la Guardia Costera fueron los encargados de socorrer a las barcazas que llegaron durante todo el día de ayer, en una nueva llegada de migrantes tras varias semanas de tranquilidad.

Según los últimos datos proporcionados por el Ministerio del Interior relativos a febrero, el número de migrantes desembarcados en las costas italianas aumentó un 43% con respecto a 2014, con un total de 7.882 frente a los 5.506 del mismo período del año anterior.

Si se mantiene ese ritmo de aumento se podría sobrepasar el récord que Italia batió en 2014, cuando llegaron más de 160.000 migrantes, una cifra que multiplicó por cuatro las más de 40.000 personas del año 2013.

En tierra, los centros de acogida en puertos como el italiano de Lampedusa se saturan y no pueden atender a tantas personas, como las que están llegando de los países expoliados.

La derrota del PP en Andalucía le fuerza a…

Un hombre es trasladado a una ambulancia tras cruzar el mediterráneo en una zodiac. / S. Rodrigo
Un hombre es trasladado a una ambulancia tras cruzar el mediterráneo en una zodiac. / S. Rodrigo

El Gobierno de España anunció ayer que rectificará parcialmente el Real Decreto introducido en abril de 2012 y permitirá el acceso de los inmigrantes irregulares a la atención primaria de salud, un rectificación que se anuncia a dos meses de las elecciones locales, curiosamente donde pueden votar la población migrante y justamente tras el desplome del Partido Popular en las elecciones de Andalucía.

Y es que el debate entre el bipartidismo se centró en los servicios públicos, sobre todo la salud, y es que mientras Susana Díaz repitió en cada pueblo de Andalucía que el PP iba a privatizar la sanidad parece que su mensaje caló tanto que el PP perdió 17 diputados.

La medida electoralista destruyó el sistema universal de Salud en España, y aunque seis comunidades españolas ya ofrecían servicios a los migrantes, la realidad es que la brecha no tenía proporción con los datos.

Según “Stop Rumores” las personas inmigrantes consultan un 7% menos al médico de cabecera que las españolas, y mientras el 57,7% de la población española ha acudido al menos una vez en el último año en el caso de los migrantes tan solo lo hizo un 12,7%.

La estimación de gasto público en Sanidad empleado en el colectivo inmigrante en los últimos años fue del 6,5%, cifra que desacredita las políticas del PP. Sin embargo el Gobierno, que no responde, no ha ofrecido a los españoles cuánto dinero a ahorrado en estos años de sin sanidad a los migrantes.

Por su parte el Observatorio de Derecho a la Salud Universal de la Comunidad de Valencia (ODUSALUD) considera que el comunicado del gobierno es insuficiente, ambiguo y deja de lado las verdaderas razones de justicia y equidad en las que se apoya el derecho universal a la asistencia sanitaria.

Según este organismo el mantenimiento de limitaciones para algunos ciudadanos en el acceso a nivel
es sanitarios que no sean Atención Primaria y la imposibilidad de exportar el derecho a la asistencia sanitaria en el marco de la Unión Europea y de los convenios colaterales internacionales de asistencia “son incongruentes con la apelación a la equidad, territorial o de cualquier otro tipo, a la que el gobierno se refiere en algunas de las declaraciones”.