Llegan a Málaga 320 niños de los campamentos de…
Un grupo de 320 niños saharauis procedentes de los campamentos de refugiados de Tinduf (Argelia) han llegado al aeropuerto de Málaga en dos vuelos para participar en el proyecto «Vacaciones en Paz» de Andalucía, que acoge este año a unos 1.200 menores.
Los niños, de entres 8 y 12 años, han sido repartidos entre familias de acogida de las provincias de Granada, Huelva y Málaga.
En los mismos vuelos ha llegado un grupo de 66 niños que pertenecen al mismo proyecto pero en las Islas Canarias, hacia donde han partido a las 11.00 de esta mañana,
Este primer grupo pertenece a los dos primeros vuelos del proyecto solidario que entre el sábado y el domingo esperan cuatro vuelos más con menores que serán repartidos por toda la comunidad autónoma para pasar los meses de verano.
La presidenta de la Federación Andaluza de Asociaciones Solidarias con el Sahara (FANDAS), Gely Ariza, ha señalado que estos niños «van a estar atendidos en cuanto a la salud, la alimentación y, lo más importante, van a encontrar una familia que les va a hacer ver que existe un mundo en paz».
Ariza ha resaltado que mientras llega el referéndum al Sahara Occidental las organizaciones andaluzas de amistad con el pueblo saharaui se van a volcar «en ese compromiso, en ese esfuerzo de decirles a estos niños que estamos aquí, que la causa de sus padres y familias no van a caer en el olvido».
Por su parte, el delegado del Frente Polisario en Andalucía, Abidín Bucharaya, ha declarado que gracias al proyecto «Vacaciones en paz» se mantiene el español como segundo idioma oficial en el Sahara Occidental, ya que los menores aprenden rápidamente el idioma durante los meses de verano.
«Estos niños durante dos meses entran por otra puerta de la vida, conviven con una familia andaluza, palpan lo que es la paz porque para ellos es algo abstracto», ha apostillado Bucharaya, quien ha precisado que gracias a esta solidaridad están educando a una generación de saharauis «mucho más tolerante».
Ha destacado que «a pesar de la crisis que hay las familias andaluzas con un gran esfuerzo han conseguido seguir manteniendo a esta comunidad» y que a través de este proyecto «se están tejiendo relaciones sociales que siempre estarán exentas de cualquier coyuntura política».
Según la organización el programa atraviesa uno de los momentos más complicados de su larga historia ya que según han insistido «la crisis económica que también a las familias de acogida, los recortes en las administraciones públicas hacen que resulte complicado sacar adelante una iniciativa como ésta».